En el sentido más amplio, el término IoT abarca todo lo que está conectado a Internet, pero se utiliza cada vez más para definir objetos que "hablan" entre sí. Simplemente, la Internet de las cosas está formada por dispositivos, desde sensores simples hasta teléfonos inteligentes y dispositivos portátiles, conectados entre sí. Al combinar estos dispositivos conectados con sistemas automatizados, es posible "recopilar información, analizarla y crear una acción" para ayudar a alguien con una tarea en particular o aprender de un proceso. ¿Como funciona? Los dispositivos y objetos con sensores integrados están conectados a una plataforma de Internet de las cosas, que integra datos de los diferentes dispositivos y aplica análisis para compartir la información más valiosa con aplicaciones creadas para abordar necesidades específicas. Estas poderosas plataformas de IoT pueden identificar exactamente qué información es útil y qué se puede ignorar con seguridad. Esta i